gal-541846Su contextura física es pequeña. Mide 1,73 metro y pesa 62 kilos. Pero arriba del monoplaza o del Renault Mégane II su figura se agiganta cada vez más. Su nombre viene haciendo ruido desde hace tiempo pero este año se escucha en todo momento.

Se sube al Tito de Fórmula Renault y gana. Maneja el TC 2000 y siempre es candidato al podio. Julián Santero sigue pisando fuerte en el automovilismo nacional. No tiene techo.

Ya lleva siete victorias en nueve finales de la “escuela” de talentos y suma dos (de seis carreras) en la categoría que es el escalón previo al Súper TC 2000.

El reciente fin de semana dio otra cátedra de manejo en Termas de Río Hondo. Se llevó ambas competencias y aumentó a 49 puntos la ventaja con su inmediato perseguidor en el certamen, Manuel Luque.

“Con el Werner Competición estamos atravesando un momento espectacular. En Termas volví a tener el auto contundente de las primeras fechas; hice una diferencia increíble en la primera carrera y también fui cómodo en la segunda, aunque entró el auto de seguridad y se redujo un poco la ventaja”, aseguró el joven piloto de Guaymallén en su diálogo con Más Deportes.

La figura que cumplirá 20 años en octubre se mostró orgulloso de haber triunfado en el autódromo que es considerado el mejor de la Argentina. “Si bien lo conocía porque corrí allí en 2011, el circuito cambió muchísimo y quería ganar en Río Hondo. Quedé sorprendido por la infraestructura, el pavimento del circuito, las vías de escape, el sector de boxes”, expresó.

Su brillante desempeño provoca que varios equipos de Súper TC 2000 lo miren con buenos ojos. “Realmente sería hermoso correr en esa categoría; me subo a cualquier auto con tal de estar. Es mi sueño pero no me desespero, porque aún debo terminar la actual temporada”, lanzó.

En cuanto a los rumores que indican su llegada en 2014, Santero aclaró que “todo queda en eso y nada más. Escucho muchas cosas pero, por el momento, no he hablado con nadie. Dicen que Toyota está interesado en mí pero a Darío Ramonda me lo he cruzado y nada más. Veré más adelante”.

Tampoco descarta su desembarco en el TC Pista. “La idea es estar en Súper TC 2000 y conseguir presupuesto para hacer dos categorías”, aclaró.

Sobre la tranquilizadora diferencia que tiene en el certamen de monopostos, el piloto más ganador del país indicó que “es muy buena, pero debo seguir con la idea de ganar. Si no se puede, lo ideal sería sumar muchos puntos. Falta mucho y no hay que dejarse estar”. 

En caso que abroche el título antes de terminar el calendario, Julián aseguró que “seguiré hasta la última fecha del año. El proyecto es por todo 2013 y quiero disfrutar de mi último año con Werner en Fórmula Renault”.

En Concordia, donde el TC 2000 compartió cartel con la Fórmula 3 Sudamericana, nuestro crédito se subió al cockpit de un Dallara.

“Fue hermoso. No lo manejé pero me encantó el auto. Es muy difícil que pueda seguir en monoplazas corriendo fuera del país; a lo mejor corrés un año y después te tenés que volver por culpa del presupuesto. Es una lástima, pero esa es la realidad”, puntualizó Julián.

Diego Rafael Espósito -Más Deportes – Los Andes

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